La rebelión contra el régimen dictatorial del general Pedro Eugenio Aramburu fue un intento de algunas facciones del Ejército sumadas con el apoyo de civiles de terminar con el gobierno de facto que había destituido a Juan Domingo Perón. Pero fueron doblegados, tras lo cual hubo fusilamientos clandestinos y también resultó ejecutado uno de sus líderes, el general Juan José Valle.
sábado 10 de junio de 2017 | 2:06 AM |El 9 de junio de 1956 fue un sábado y resultó la fecha elegida por el Movimiento de Recuperación Nacional, dirigido por los generales Juan José Valle y Raúl Tanco, de extracción peronista, para concretar una rebelión armada que intentó derrocar la dictadura del general Pedro Eugenio Aramburu. Los puntos centrales del alzamiento fueron el Regimiento 7 de Infantería de La Plata y la Guarnición de Campo de Mayo, mientras que en La Pampa se produjeron los avances rebeldes más fuertes. A casi un año del derrocamiento de Perón por la llamada Revolución Libertadora, todas estas acciones recibieron un importante apoyo civil.
Pero las fuerzas rebeldes fueron derrotadas rápidamente por un Ejército que no ahorró violencia, bajo las órdenes del almirante Isaac Rojas. La guarnición de Santa Rosa fue atacada por aviones de la Fuerza Aérea y la Marina y el día 12 se implantaron la ley marcial y la pena de muerte. Pero antes de que las decretaran, las autoridades ordenaron fusilamientos clandestinos, como el de los basurales de José León Suárez. Este hecho quedó retratado en el libro «Operación Masacre», en el que el periodista Rodolfo Walsh estableció con testimonios y pruebas que los asesinatos fueron previos a la sanción de las leyes y, por lo tanto, completamente ilegales. Obtiene la primera pista al escuchar a uno de los sobrevivientes, Norberto Gavino, contar la historia en un bar.
También hubo fusilamientos en cuarteles de Lanús, La Plata y Campo de Mayo, en la Escuela del Ejército, en el Automóvil Club Argentino y en la Penitenciaría Nacional, con un total de once oficiales, siete suboficiales y nueve civiles muertos. Uno de ellos fue Juan José Valle, fusilado el 12 de junio en la Penitenciaría Nacional, donde hoy se encuentra el Parque Las Heras.